viernes, 3 de octubre de 2008

Guzmán el Bueno

Prensa - Diario de Leon - 28/09/2008

TRIBUNA
Joaquín Cuevas Aller

El próximo año 2009 se cumplirán los setecientos años de la muerte de uno de los personajes leoneses y españoles más fascinantes de todos los tiempos: Alonso Pérez de Guzmán, más conocido como Guzmán el Bueno. Guzmán murió un viernes, el día 19 de septiembre del año 1309, peleando valerosamente contra los moros en la Serranía de Gausín, cerca de Granada, después de arrebatarles la importante plaza de Gibraltar. España tiene fama universal de ser tierra de santos y de héroes. Pues bien, entre estos últimos destaca con luz propia Guzmán el Bueno. Pero a diferencia de otros héroes, que han recibido su fama en base a leyendas, Guzmán el Bueno debe su prestigio a un hecho rigurosamente histórico. Ningún historiador o cronista ha puesto nunca en duda la veracidad de los hechos

En un pequeño resumen de este gran héroe leonés podemos decir lo siguiente: Alonso Pérez de Guzmán nació en León el día 24 de enero del año 1256. Era hijo de Don Pedro Núñez de Guzmán y de Doña Urraca Alfonso, hija de Alfonso IX. Este noble leonés salió con sólo 19 años con otros nobles leoneses para Andalucía en ayuda de las tropas cristianas en lucha contra los musulmanes de Granada. Pronto dio muestras de un gran valor, llamando la atención de su primo hermano Alfonso X el Sabio, que le encomendó puestos de gran responsabilidad. En el año 1286, su primo, el Rey Alfonso X, viéndose desamparado de todos y perseguido por su propio hijo, el infante Don Sancho, envió a Don Alonso Pérez a pedir ayuda al Rey de Marruecos, permaneciendo unos años en ese país norteafricano al servicio del Sultán h asta su muerte. Posteriormente regresó a la península donde fue nombrado gobernador de Tarifa por el nuevo Rey Sancho IV.

Tarifa fue atacada por los moros, acompañados del infante Don Juan, hermano de Sancho IV. Don Juan tenía en su poder a un hijo de Don Alonso Pérez de Guzmán y le amenazó con degollarlo allí mismo sino entregaba la plaza. Guzmán le arrojó entonces su propia espada para que ejecutase su amenaza y darle a entender que era mayor la fidelidad al Rey y a España que el amor paterno.

Informado el Rey Sancho de lo ocurrido en Tarifa, envió una carta a Don Alonso Pérez de Guzmán el 2 de enero de 1205 en estos términos: «Sabido habemos lo que por nos servir habedes fecho en defender esa villa de Tarifa a los Moros, habiéndoos tenido cercado seis meses y puesto en estrecho y afincamiento y principalmente supimos y en mucho tuvimos dar la vuestra sangre y ofrecer el vuestro primogénito fijo por el mi ser vicio y el de Dios delante y por la vuestra honra. En lo uno imitasteis al padre Abraham que por servir a Dios le daba él su fijo en sacrificio y en lo otro quisisteis semejar a la buena sangre donde venides; por lo qual merecéis ser llamado Bueno, y así os llamo y vos os llamaréis dende aquí adelante, ca justo es, que el que face la verdad que tenga nombre de Bueno»

Guzmán el Bueno tuvo que haber sido en el pasado un personaje especialmente importante porque a diferencia de otros grandes personajes leoneses que fueron difamados con hechos inciertos, a Guzmán, como no han tenido valor de endosarle algún acto criminal le han criticado por su origen, diciendo que fue un hijo ilegítimo de Don Pedro Núñez de Guzmán, que su madre no fue Doña Urraca Alfonso, hija del gran Alfonso IX. Curiosamente los que así le critican no dicen quien fue entonces su madre, No saben, o mejor dicho, no quieren saber que cuando Guzmán nació, sus padres estaban casados y como demostró el escritor Luis de Salazar (siglo XVIII) si Guzmán no hubiese sido hijo de Doña Urraca Alfonso, hermana de Fernando III, no le hubiera llamado Alfonso X su primo por dos veces en una carta que envió a Guzmán. Si hubiera sido un hijo ilegítimo no le hubiera correspondido ese tratamiento. Así estaba dispuesto por las leyes de aquel tiempo y así era en la práctica, que el hijo ilegítimo fuese reconocido pero no heredase la dignidad del padre.

El próximo año 2009 se cumple el séptimo centenario de la muerte de Guzmán el Bueno. Hasta el día de hoy no he leído ningún artículo o crónica que haga referencia a este aniversario, ni preparación alguna para conmemorar como se merece la memoria de uno de los leoneses más ilustres que hemos tenido en nuestra gloriosa historia.

Cuando en otras regiones están celebrando por todo lo alto pequeñas gestas de personajillos o de personajes de leyenda o inventados, aquí estamos despreciando a héroes que han marcado un ejemplo de lealtad, de honorabilidad y de sacrificio verdaderamente heroico como pocos ejemplos tenemos en la Historia de León y de España. Es increible ver como en La Coruña y en Toledo están celebrando con gran dignidad actos importantes en honor de nuestros Reyes Alfonso IX y Alfonso VI mientras aquí pasan desapercibidos como si no hubiesen existido. A ver si va a pasar como el 1.100 aniversario de la Fundación del Reino de León que, tal vez, sin mi recordatorio publicado en estas mismas páginas, hubiese pasado desapercibido. Tengo la impresión que los leoneses estamos perdiendo la conciencia de ser precisamente eso, leoneses. La persona que no conoce su pasado ni se conoce a si mismo, ni sabe quien es, ni sabe a donde va. Guzmán el Bueno es uno de los mejores ejemplos de lealtad, honradez y sacrificio que podamos encontrar en la Historia de España, y es de aquí, de León. ¿Cuántos aniversarios de acontecimientos importantes de nuestra Historia hemos dejado de celebrar en León en los últimos veinticinco años? Con el debido respeto a todas aquellas personas que pueden y deben promocionar lo mejor de León ¿vais a dejar pasar esta nueva oportunidad de recordar a los leoneses y a todos los españoles quién era Guzmán el Bueno?

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