El escándalo provoca las dimisiones del secretario territorial de Zamora y del jefe de la Tesorería General de la Junta
El delegado territorial palentino cree que Francisco Jambrina también debe presentar su dimisión
El ya ex secretario territorial de la Delegación de la Junta de Castilla y León en Zamora, Manuel Méndez, presentó ayer la renuncia a su cargo al delegado en la provincia, Alberto Castro, «para evitar cualquier daño a la Junta y a la Delegación ya que, según él, posee una pequeña participación en una sociedad que está tramitando en la actualidad un expediente» sobre una planta energética fotovoltaica. Así lo explicó Castro en la tarde de ayer en un rueda de prensa en la que agregó que la dimisión de Méndez «se produce como consecuencia de las diferentes informaciones que están apareciendo en algunos medios de comunicación sobre diversos asuntos relacionados con instalaciones fotoeléctricas».
El delegado de la Junta en Zamora también aseguró que la planta en la que el ex secretario tiene su participación «no está en marcha y todavía se encuentra en tramitación administrativa». «En la actualidad, se está investigando si dicha sociedad ha realizado la tramitación administrativa de manera correcta pero, en principio, aunque parece ser que no existe ninguna incompatibilidad legal con esta actividad, acepto su renuncia por una cuestión meramente ética», añadió.
Castro agradeció a Méndez «la facilidad que me ha trasladado, porque ha sido él quien pidió la renuncia, me expuso los hechos y lo acepté», aunque eludió pronunciarse sobre si él mismo habría pedido su dimisión en el caso de que no la hubiera presentado. «No hablo de suposiciones, sino de realidades», argumentó.
El delegado territorial de la Junta aseguró que «en principio, no debería haber más renuncias de funcionarios» en la sede zamorana, pero aseguró que la Administración «está abierta a vigilar que todos los funcionarios realicen su actividad con garantía y profesionalidad. A raíz de los hechos, se tomarán decisiones. La investigación está abierta y actuaremos según la información que poseemos. A la Junta nunca le ha temblado la mano y no se le puede pedir más que la absoluta transparencia en todo lo que está pasando», aseguró. Hasta que se nombre a un nuevo secretario territorial, Alberto Castro asumirá las funciones de este cargo. Por su parte, a Manuel Méndez, como funcionario de la Junta, «se le asignará un nuevo destino, dentro de su categoría y nivel», adelantó el delegado territorial.
Segunda dimisión en un día
El jefe del servicio de Caja de la Tesorería General de la Junta de Castilla y León, Manuel Ballesteros, también anunció ayer su dimisión tras mantener una conversación con la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, sobre su vinculación con la adjudicación de plantas fotovoltaicas.
Según han explicado a Efe fuentes de la consejería en la que Ballesteros desempeñaba su labor, la decisión la ha tomado después de hablar con Del Olmo, aunque sus superiores del departamento consideran que la conducta profesional de este alto cargo durante los más de 20 años en el mismo puesto «ha sido intachable».
La dimisión de Ballesteros es la quinta que se produce en el seno de la Junta de Castilla y León en las últimas dos semanas después de que trascendiera que el ya ex secretario de la Delegación Territorial de la Junta en León Javier Lasarte presentara su renuncia al cargo tras conocerse que era titular de empresas que habían resultado adjudicatarias de plantas fotovoltaicas.
A estas dimisiones hay que unir las del ya mencionado Javier Lasarte, la del jefe de Industria, Emilio Fernández Tuñón, y la de la jefa del Servicio Territorial de Fomento de la Delegación de la Junta en León, Ana Isabel Suárez.
Con estos son ya cinco los altos cargos de la Junta de cuatro provincias -León, Zamora, Valladolid y Palencia- que se han visto obligados a dimitir por el escándalo de los huertos solares y tres las consejerías -Economía y Empleo, Hacienda y Fomento- que han visto como alguno de sus jefes de servicio están involucrados en esta trama de autorizaciones para plantas de energía fotovoltaica.
«Si fuera Jambrina, dimitiría»
El delegado de la Junta de Castilla y León en Palencia, José María Hernández, manifestó ayer que él «dejaría el puesto» si estuviera en la situación del jefe del servicio de Industria, Francisco Jambrina, a quien se relaciona con la adjudicación irregular de plantas fotovoltaicas.
En declaraciones a los periodistas, Jose María Hernández ha insistido en que el jefe del Servicio de Industria de Palencia no es un funcionario de libre designación y, aunque la Junta le ha «sugerido» que deje su cargo, la renuncia a su cargo debe partir de él mismo.
«Su plaza fue adjudicada por concurso en 1992 y no esta sujeto a un cese motivado por la Junta, sino que la renuncia a su puesto tiene que partir voluntariamente de él», ha precisado Hernández.
Sin embargo, el responsable de la Junta en Palencia ha manifestado que, con independencia de lo que tenga que decir la Dirección General de Servicios y la propia Consejería de Economía y Hacienda, «lo que yo haría como funcionario de una administración en una situación como esta sería dejar el puesto». «Yo he elegido ser funcionario y por lo tanto entiendo que no me debo meter en más situaciones particulares, pero lo que hagan otras personas que estén en mi misma condición depende de ellos», ha añadido.
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