La compañía dio a finales de septiembre una última semana para recibir el apoyo de la Junta
El plan de viabilidad y la ampliación de capital, pendientes de las ayudas públicas
M. J. Muñiz
El Consejo de Administración de Lagun Air decidirá hoy definitivamente el futuro inmediato de la compañía, después de cumplirse el último plazo de una semana dado a finales de septiembre por la dirección para que el consorcio del Aeropuerto y la Junta decidieran sobre la ampliación de las ayudas públicas, el plan de viabilidad y la entrada de nuevos accionistas (entre ellos Caja España) a través de una ampliación de capital de cinco millones de euros.
La empresa ya explicó en el último encuentro entre las instituciones implicadas en este proceso que sólo tenía capacidad financiera para aguantar siete días más operando; un plazo en el que de momento se ha cumplido la anunciada suspensión de vuelos a Málaga desde León, Valladolid y Salamanca.
Así las cosas, y a expensas de que se produzca un compromiso de última hora de la Junta sobre las ayudas públicas a la aerolínea, los directivos procederán al anunciado «cierre ordenado» de la actividad, cinco años después de haber tomado las riendas de la compañía.
El 4 de septiembre Lagun Air anunció la suspensión de varios vuelos y un expediente de regulación de empleo que afectaría al 30% de la plantilla, justificando la situación en el descenso del número de pasajeros y el incremento del precio de los combustibles. También denunció entonces que el consorcio, y en especial la Junta, no había cumplido con sus compromisos financieros para con la compañía, un hecho que fue después rectificado por la dirección. El anuncio suponía también la devolución de uno de los tres reactores con los que opera la aerolínea.
Poco después la compañía anunció una ampliación de capital, por cinco millones de euros, en la que Caja España participaría siempre que la Junta apoyase el plan de viabilidad. Un plan que pasa por un incremento de las ayudas públicas del gobierno autonómico, que deberían pasar de los siete millones actuales a los doce al año.
Esta ampliación de las ayudas públicas se considera el principal aval para garantizar la viabilidad del proyecto de futuro presentado por la compañía; pero hasta el día de hoy la Junta no ha confirmado este apoyo, por lo que la posibilidad del cierre sigue sobre la mesa.
El Consejo de Administración de Lagun Air decidirá hoy definitivamente el futuro inmediato de la compañía, después de cumplirse el último plazo de una semana dado a finales de septiembre por la dirección para que el consorcio del Aeropuerto y la Junta decidieran sobre la ampliación de las ayudas públicas, el plan de viabilidad y la entrada de nuevos accionistas (entre ellos Caja España) a través de una ampliación de capital de cinco millones de euros.
La empresa ya explicó en el último encuentro entre las instituciones implicadas en este proceso que sólo tenía capacidad financiera para aguantar siete días más operando; un plazo en el que de momento se ha cumplido la anunciada suspensión de vuelos a Málaga desde León, Valladolid y Salamanca.
Así las cosas, y a expensas de que se produzca un compromiso de última hora de la Junta sobre las ayudas públicas a la aerolínea, los directivos procederán al anunciado «cierre ordenado» de la actividad, cinco años después de haber tomado las riendas de la compañía.
El 4 de septiembre Lagun Air anunció la suspensión de varios vuelos y un expediente de regulación de empleo que afectaría al 30% de la plantilla, justificando la situación en el descenso del número de pasajeros y el incremento del precio de los combustibles. También denunció entonces que el consorcio, y en especial la Junta, no había cumplido con sus compromisos financieros para con la compañía, un hecho que fue después rectificado por la dirección. El anuncio suponía también la devolución de uno de los tres reactores con los que opera la aerolínea.
Poco después la compañía anunció una ampliación de capital, por cinco millones de euros, en la que Caja España participaría siempre que la Junta apoyase el plan de viabilidad. Un plan que pasa por un incremento de las ayudas públicas del gobierno autonómico, que deberían pasar de los siete millones actuales a los doce al año.
Esta ampliación de las ayudas públicas se considera el principal aval para garantizar la viabilidad del proyecto de futuro presentado por la compañía; pero hasta el día de hoy la Junta no ha confirmado este apoyo, por lo que la posibilidad del cierre sigue sobre la mesa.
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